Juguetes bíblicos, a la venta

 

En lugar del Hombre Araña o las muñecas Bratz, los niños de Estados Unidos podrían estar estrechando en sus brazos, muy pronto, a un Jesús parlante, un Moisés barbudo o a un musculoso Goliat. Wal-Mart, la macrocadena estadounidense de supermercados, ha lanzado una serie de juguetes bíblicos. Lo ha hecho en 500 establecimientos, pero no descartan ampliar la oferta a todas sus sucursales. Entre los juguetes están Jesucristo, Sansón o Noé. Podrían llamarse Los muñecos de la Biblia, pero los creativos han decidido llamarlos Blessed Toys (los juguetes bendecidos).

"Juega a ser Noé y construye tu propia arca", "no dejes que Sansón pierda su pelo" o "acaba con Goliat con un golpe certero" podrían ser algunos de los lemas de esta serie de productos, que te permiten recrear pasajes bíblicos con pequeños muñecos articulados. "Si eres una persona religiosa, se trata de una batalla por las mentes de tus hijos y por sus juguetes", advierte en su web David Socha, responsable de la compañía One2believe, que fabrica estos juguetes que buscan propagar la fe de manera más entretenida. Por el momento se venden en unos 500 establecimientos de todo el país, pero si el producto funciona, el objetivo de Wal-Mart es ampliar la oferta a sus más de 3.300 sucursales.

 

Las figuras, sacadas de la Biblia, tendrán inicialmente un espacio de poco más de medio metro en los estantes de 425 de las 3.300 tiendas que la compañía tiene en todo el país.
Ahí, los muñecos de Tales of Glory (Cuentos de la Gloria) enfrentarán lo que sus fabricantes llaman "la batalla por la caja de juguetes" contra algunas de las figuras de acción más populares de la nación.

De manera notoria, este mercado es muy difícil de quebrar, pues cada niño está esperando tener lo que sus amigos en la escuela ya tienen, y marcas de alto perfil como los Transformers y el Hombre Araña dominan la publicidad.

¿Podrá el muñeco de Jesús, de 30 centímetros de alto, citando las Escrituras, o la figura de Daniel, de 8 centímetros, en la guarida del león, abrirse camino en la imaginación de los niños y en las billeteras de sus padres?
David Socha, fundador de One2believe, la empresa que fabrica los muñecos, está confiado en que hay demanda para juguetes que "honran a Dios" y reflejan las enseñanzas y la moral cristianas.

"Si vas a un pasillo de juguetes de algún establecimiento importante, verás juguetes y muñecas que promueven y glorifican el mal, la destrucción, la mentira y la trampa"
David Socha, fundador de One2believe
"Tenemos a mucha gente, incluso a gente que no tiene fe, no va a la iglesia, que nos dice 'tengo un niño de cuatro años y otro de seis, y ya no sé que más regalarles'", dijo.
"Si vas a un pasillo de juguetes de algún establecimiento importante, verás juguetes y muñecas que promueven y glorifican el mal, la destrucción, la mentira y la trampa.
"En los pasillos de las niñas, en donde estarían las muñecas, uno ve muñecas que promueven la promiscuidad a las muy jovencitas. Las muñecas llevan ropas muy reveladoras, con ropa interior atrevida".

Lo que su compañía ofrece, en cambio, es "algo basado en la fe, que no solamente es divertido para jugar, sino también algo que solidifica los medios espirituales y su camino espiritual", señaló.

Al ofrecer una alternativa basada en la fe al dominio de lo comercial, Socha está explotando una tendencia de alcance nacional.

Las ventas de los llamados productos cristianos, que incluyen libros, música, ropa y regalos, se han elevado de forma constante pasando de US$4.000 millones en 2000 a US$4.630 millones en 2006, según la Association for Christian Retail.

Como parte de ese crecimiento está el "boom" de libros de fantasía cristiana, algunos escritos en respuesta a la incomodidad de algunos cristianos por el uso de la magia en los libros de Harry Potter.

De acuerdo con el Grupo de Estudio de la Industria del Libro, las ventas de libros religiosos crecieron en un 5,6% en 2006. Otro sondeo indica que quienes compran libros cristianos gastan tanto en libros como lo hace el estadounidense promedio.

Casi 12% de estadounidenses gastan más de US$50 al mes en productos religiosos, y otro 11% gasta al mes de US$25 a US$29, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Baylor. Uno de cada tres estadounidenses encuestados hacen compras al menos una vez al año en una librería cristiana.

Nancy Guthrie, de la Association for Christian Retail, dijo: "Durante la última década hubo una apertura significativa en el mercado para productos cristianos.
"Todas las empresas han reconocido que hay mucha gente que quiere libros,música y artículos de regalo que reflejen su fe".

El hecho de que dos libros cristianos estuvieran en lo más alto de la lista de best-sellers estadounidenses en 2001, uno de los cuales fue la novela de fantasía "Desecration", ayudó a crear conciencia de la disponibilidad de tales productos, dijo.

Además, la película de Mel Gibson "La Pasión de Cristo", de 2004, mostró a todos que hay mercado e interés para medios y entretenimiento cristiano, añadió Guthrie.
Tradición

La vocera de las tiendas, Melissa O'Brien dijo que tenía sentido para un gigante mercantil -que ha tenido artículos religiosos previamente, pero nunca una línea completa de juguetes basados en la fe- intentar llegar también a ese público.

Las tiendas elegidas para la venta inicial son aquellas en las que otros productos basados en la religión, como la Biblia y música religiosa, se han vendido muy bien, señaló.
La mayoría se localizan en los centros de las tiendas de autoservicios en el sur y medio oeste de EE.UU., aunque algunas están en California y en el noreste de Pensilvania.
Los juguetes son para niños de 3 a 12 años y vienen acompañados con un libro que cuenta la historia respectiva.

"Es realmente una prueba ver cómo van a responder los consumidores", añadió O'Brien. "Anticipamos que habrá padres y maestros que encuentren estos juguetes beneficiosos en la enseñanza de historias bíblicas".

Laurie Schacht, presidente de la publicación "The Toy Book" (El Libro del Juguete), cree que los juguetes basados en la fe podrían venderse bien en el mercado correcto, aunque no serán del gusto de todos.

"Creo que hay padres que quieren toda novedad que sale y creo que hay padres que quieren dar a sus hijos cosas más tradicionales", afirmó.
"Creo que va a ser una compra de los padres, mucho más que un deseo de los niños. Creo que hay un mercado y me parece que Wal-Mart lo ve y le ha abierto espacio en sus estantes".

Schacht apunta que ha habido por años juguetes basados en la fe, como la serie de Precious Moments, en tiendas cristianas especializadas, pero que esta será la primera vez que un supermercado de compras masivas salta al ruedo.

¿Pero qué tal el atractivo para los niños? "Como todo lo demás, si los juguetes tienen un 'valor de juego' y los pones enfrente de un niño, les va a ir muy bien", dijo.
Socha afirma que en el corazón del proyecto ha estado hacer que los juguetes sean atractivos a los niños, y que se han probado en escuelas dominicales y en grupos de la iglesia.

"Si los niños no se enganchan y no se divierten, entonces, no tendría sentido lo que hacemos", añadió.

 

 

Fuente de información sacada de: http://www.terra.com.mx/articulo.aspx?articuloid=364245